Acrónimo de «Business to Consumer». Este término hace referencia a las estrategias que las empresas implementan para interactuar directamente con el cliente o consumidor final.
Comúnmente, también indica las transacciones que se realizan directamente entre un cliente y una empresa, sin la intervención de intermediarios.
Esta modalidad es frecuente en comercio electrónico y servicios en línea, permitiendo una relación más directa y personalizada con el consumidor.