El IDS, o Sistema de Detección de Intrusos, es una herramienta de ciberseguridad diseñada para identificar y alertar sobre cualquier actividad sospechosa o no autorizada en un sistema o red informática.

Esto se logra mediante el monitoreo constante del tráfico de red y el análisis de comportamientos que podrían indicar una amenaza, como intentos de acceso ilegítimo o violaciones de políticas de seguridad.

Sin embargo, a diferencia de los Sistemas de Prevención de Intrusos (IPS), los IDS no toman acciones para bloquear o prevenir la actividad detectada, se limitan a emitir notificaciones sobre la actividad sospechosa.