Es una herramienta de software o hardware que permite interceptar y registrar el tráfico de red. Al operar en modo promiscuo, la tarjeta de red capta todos los paquetes de datos que pasan por la red, independientemente de a quién estén dirigidos.
Los sniffers pueden ser utilizados por profesionales de la ciberseguridad para diagnosticar problemas de red, pero también pueden ser empleados por actores maliciosos para robar información sensible, como contraseñas o datos bancarios, particularmente si estos datos no están cifrados.
Dada la dificultad de detectar un sniffer, es fundamental asegurar las comunicaciones mediante cifrado para prevenir cualquier exposición indeseada de la información.